Un sistema de alarma consiste en la instalación de una serie de equipos electrónicos en los hogares, empresas o locales y que están conectados hacia una central de monitoreo. Estos dispositivos pueden ser sensores de movimiento, contactos magnéticos, detectores de humo, botón de pánico, entre otros, estos envían señales en forma periódica a una central de monitoreo durante las 24 horas del día.